martes, 24 de julio de 2012

Tres ideas para reforzar el relato del PSOE ante la crisis

Odón Elorza. Donostia.

La escalada de recortes y reformas aprobadas por el Gobierno de Rajoy, entre aplausos del PP y "que se jodan", me parece particularmente inadmisible porque vuelve a castigar a la ciudadanía más indefensa. Ante ello, la posición de los Socialistas, que sabemos que el necesario combate contra la crisis no lo justifica todo y que los procesos de toma de decisiones han de seguir pautas democráticas, no puede quedar desdibujada ante la sociedad española.

Precisamente, el mismo sentido de responsabilidad con el que debiera abordarse la recuperación económica del País y las reformas estructurales precisas para evitar caer en el precipicio de la intervención total, me lleva a defender tres ideas básicas que debería forman parte de un Programa Mínimo para combatir la crisis desde posiciones de izquierda :

1. Partimos de la premisa de que la mayoría social no es causante de la crisis. Esto exige presentar de inmediato un PLAN de SOLIDARIDAD que, cuando menos, garantice el blindaje de las capas de población más desfavorecidas y de los que viven en riesgo de exclusión social para que no se encuentren desamparados por el Estado y tengan sus mínimos vitales cubiertos. Sería el caso de personas desempleadas sin subsidio o con ayudas insuficientes, personas con Dependencia, pensionistas que no puedan afrontar el copago sanitario, etc

2. Es injusto que la mayor parte de la factura de la austeridad, la corrección del déficit público y las pérdidas de las entidades bancarias nacionalizadas la pague la ciudadanía de a pie mientras el mundo inmobiliario, Bancos y Cajas se van de rositas.

Por tanto, es exigible la aplicación de MEDIDAS FISCALES para lograr un reparto justo de los sacrificios de la crisis, de modo que no recaigan en las personas más humildes y en las clases medias. Así, razones de solidaridad hacen necesario un impuesto sobre las grandes fortunas, la adecuación de la progresividad del IRPF, un impuesto sobre el patrimonio, y especialmente la lucha contra el fraude y la evasión fiscal de aquellos "patriotas" que además reciben el regalo de una anmistía fiscal.

3. Pero la crisis también se combate desde la transparencia y nunca debemos aceptar ajustes y reformas estructurales fruto de la imposición y la prepotencia, con ausencia de explicaciones y diálogo en el Parlamento y con engaños a la ciudadanía.

El PS ha de liderar la defensa, sin concesiones, de un Programa de actuaciones democráticas para favorecer la TRANSPARENCIA en la lucha contra toda clase de corrupciones, el DIÁLOGO en la gestión de la crisis por los Gobiernos, así como la INVESTIGACIÓN rigurosa por el Parlamento en la depuración de responsabilidades por los casos de fraude o mala administración que se vienen conociendo (Bankia y otras Cajas).

Y si Rajoy no cambia su forma de proceder, los Socialistas no podríamos apoyar la reforma del sistema bancario. Nunca sin transparencia; que quede claro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario